nadie tiene la culpa
Posted on 14:59
Desmenuzaba la ciudad dando pasos
salpicando mi odio hacia los dignos ciudadanos, yo arrasado por la
lluvia me preguntaba por tu sol en la meta nueva del mundo alojada en
Occidente. Ahora escucho jazz por las noches y en los días me oculto
como un Caracol seco, yo desmenuzaba tu cuerpo que era de templada
desnudez vegetal y me querías arrancar a besos mi otra desnudez sin
pétalos de agua en la mirada, traviesa forma de burlarse de la noche,
toda seria, donde ya ni los amantes se traducen en carne de bolero, pues
se suben los recuerdos a la sien y como caballos trillan la sed del
olvido, un raso de sábanas es inmenso cuando tú no estás, bailo contigo
en la cafeta de la madrugada y arrastro mi deseo para someterte a una
humedad pequeña, pateo las avenidas y rastreo la baba del pasado que
guardan los relojes en sus soliloquios vomitando segundos y más
segundos, me invento poemas como este para no tener que arrojarme a los
bares nocturnos donde escupe mi nombre la policía en su turno que sabe a
café y mala leche, no leche agria, esa la prueban los padres valientes
que duermen la vigilia de sus hijos por que al otro día hay colegio, al
otro día hay colegio y para mí no hay nada, disfrazo mi bilis con
sonrisas que a nadie engañan, mimetizo mi orfandad visitando la casa de
mis padres, ellos me leen la cartilla y yo me porto como un parvulario
hombre que se sabe ya el himno nacional y la tabla de restar, aquí
quedo, y nadie tiene la culpa de eso.
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capplannetta,
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