Capplannetta en motocicleta
Posted on 12:22
Cuando era adolescente me compré una motocicleta, bueno, en realidad era un ciclomotor a dos tiempos. Era de la marca famosa en Catalunya Derby, digo lo de famosa porque la sede de esta marca de motocicletas está en Mollet del Vallés. Era el modelo Derby Variant. Mi madre quiso que me la comprara a regañadientes, en realidad el tiempo en el que tuvimos motocicleta yo y mi hermano mi madre fue la que más sufrió. Cada vez que sentía una ambulancia se ponía muy nerviosa. Lo que hacíamos con las motos era muchas veces como convertirnos a nosotros mismos en diseñadores de nuestros propios vehículos. Le trucábamos el motor, la tuneábamos a nuestro gusto. Cuando salíamos los chicos de mi barrio y yo llevábamos a algún chico amigo nuestro de paquete, como se suele decir, ya que sus padres por miedo se negaban a que tuvieran moto. Ponían la excusa de que había autobuses. Aunque, a decir verdad, yo todos los accidentes que he tenido han sido muy cercanos al barrio donde residen mis padres. Una vez nos fuimos a dar un paseo en motocicleta un amigo y yo. El amigo era y es como un hermano, Juan se llama. Paseábamos para vacilar a las niñas y dando vueltas por donde ellas andaban, quemando y malgastando gasolina tontamente, pero en aquel tiempo te daba todo igual. Íbamos este amigo y yo dando vueltas con mi moto por el barrio, y yo llevaba el casco protector obligatorio en el brazo. De repente nos pasamos un semáforo con la luz ámbar y nos arrolló un automóvil que venía con exceso de velocidad carretera abajo. Eran dos chicas. Nos acusaron de pasarnos un semáforo en luz roja y nosotros a ellas de ir demasiado deprisa. Hicimos el parte de accidentes y los vecinos comenzaron a curiosear y se montó todo un espectáculo en torno al accidente. La suerte fue que no intervino la policía local, entonces no había Mossos de Esquadra. Este texto que parece costumbrista y carece de interés viene a colación de lo peligrosas que son las motos, ya que los coches no las respetan. En invierno pasas un frío tremendo. Cuando llueve no puedes ni conducir bien. Pero aquel día, yo y mi amigo volvimos a nacer. Así, como suena.